¿Necesitas un relleno nórdico? El mercado te ofrece miles de precios y calidades. Aquí tienes las claves para no perderte y acertar en la compra.

Al comprar un edredón hay varios aspectos que debes tener en cuenta para que luego no te arrepientas. Son los siguientes.

VALORA TUS NECESIDADES

Decide si te hace falta un edredón que dé mucho calor o algo más ligero, en función del clima del lugar donde vives, de si eres caluroso/a o friolero/a….. Los edredones naturales (de pluma o plumón) interesan en lugares con mucho frío, ya que aíslan más y transpiran mejor que los sintéticos (de fibras como el poliéster). Y si eres alérgico/a a los ácaros del polvo, elígelo con tratamiento antiácaros.

 ¿QUÉ MANTENIMIENTO NECESITA?

  • Sintéticos.- son más resistentes y pueden lavarse en la lavadora si entran bien en el tambor a 60º (a esta temperatura mueren los ácaros) y con jabón neutro; si no, no lo hagas puede estropearse por el peso y, además, el edredón no se lavaría bien. No uses lejía y sécalo en la secadora. Si no tienes, bien extendido. El tejido exterior de los sintéticos ha de ser suave y lavarse bien.
  • Naturales.- Los que llevan relleno natural, depende, debes seguir las instrucciones del fabricante: algunos han de llevarse a la tintorería; otros sí pueden lavarse a máquina a 60º, sin centrifugar ni usar suavizante. Y además, metiendo 2 ó 3 pelotas de tenis para que salgan más esponjosos (también en la secadora) y haciendo un aclarado extra para que no queden restos de jabón. Si no tienes secadora, tiéndelos en horizontal. El tejido exterior mejor comprarlo de algodón y denso, para que no se salgan las plumas. Mira la etiqueta, ha de indicar el peso metro cuadrado del relleno interior. A menor peso, mayor calidad (el plumón pesa menos pero abriga más).

FÍJATE EN LA CONFECCIÓN

Es importante fijarse en la confección y los remates. Si tiene tabiques o costuras interiores, el relleno quedará bien distribuido. Y el embalaje de los naturales ha de ser de tela transpirable; no lo compres si viene en una bolsa de plástico